FINE LITTLE DAY Fine Little day es una pequeña empresa, creada en 2007 por la genial creatividad de un blog de Elisabeth Dunker, fotógrafa y creativa sueca con varias habilidades artísticas. En su blog recoge fotografías de su vida de todos los días, paisajes, imágenes de su estudio, de su casa en el campo y sus gatos, en poco tiempo ha conseguido apasionar a miles de personas de todo el mundo y su blog fue seleccionado como uno de los mejores entre varios periódicos y revistas como New York Times y Vogue. Del blog nació un libro, Fine Little day, donde las imágenes cuentan más emociones

FINE LITTLE DAY Fine Little day es una pequeña empresa, creada en 2007 por la genial creatividad de un blog de Elisabeth Dunker, fotógrafa y creativa sueca con varias habilidades artísticas. En su blog recoge fotografías de su vida de todos los días, paisajes, imágenes de su estudio, de su casa en el campo y sus gatos, en poco tiempo ha conseguido apasionar a miles de personas de todo el mundo y su blog fue seleccionado como uno de los mejores entre varios periódicos y revistas como New York Times y Vogue. Del blog nació un libro, Fine Little day, donde las imágenes cuentan más emociones de las que pueden contar las palabras. Se tradujo a varios idiomas, entre ellos coreano y japonés, fue un éxito y sus páginas han podido conocer manos, ojos y lugares de todo el mundo. Esta pequeña y preciosa empresa nació de la colaboración de Elisabeth Dunker y Ulrika E. Engberg, es una empresa no común porque nunca pretendió ser popular y tampoco se valió de estrategias de marketing para mantenerse fiel a su misión principal: regalar emociones en la vida de cualquiera respetando el medioambiente y la calidad de vida de los trabajadores. Un pequeño mundo. Sus productos, con líneas naíf delicadas, cuentan la vida de todos los días con espontaneidad, ingenuidad, simplicidad e inocencia, llena de pequeños objetos, decoraciones para el hogar y accesorios para adultos con un alma y niños que encuentran la felicidad. Pureza e integridad de Fine Little Day siguen llamando la atención, amueblando habitaciones y utilizando los accesorios de esta empresa. Incluso un trapo simpático o un cuadro con una pera ceñuda, cuentan que la magia se encuentra en los pequeños gestos diarios. Los materiales son naturales y gracias a ellos la cotidianidad se convierte en poesía y magia. La ironía de los dibujos infantiles da alegría, los personajes representados en las decoraciones y los paisajes son una llamada de la naturaleza pensada como maestra que tiene grandes artistas pero también como el alma del ser humano que necesita soñar e inspirarse en atmósferas de ensueño con un ritmo lento, que es la verdadera esencia de la vida. Hojeando las páginas de los productos podemos notar objetos de cerámica de formas diferentes que representan la naturaleza, o tejidos estampados con varios abetos, líneas no perfectas típicas de los dibujos infantiles, botones gigantes con rostros y animales de colores, imágenes y papel de envolver, tarjetas de felicitaciones con imágenes graciosas de conejos y otros animales con rayas, gatos tumbados y relajados. Cuerdecillas naturales para envolver regalos, cuadernos para dibujar con varias imágenes propuestas por artistas de todo el mundo, entre ellos Mogu Takahashi. Almohadas, impresiones sobre lienzo con asta de madera y soporte de cuero para colgarlas, pósteres, calcetines, delantales, manteles y toallas, mantas, sábanas, adornos de pared, cestas trenzadas. Los materiales son muchísimos y, cuando es posible, naturales, por ejemplo lienzo, algodón, lana decorada, papel para usos diferentes, madera recogida en la playa que se convierte en asta para soportar maravillosos atrapasueños realizados con cerámica decorada, vidrio, cuero, pero también corteza de abedul para trenzar amplias cestas. El sueño se nos presenta, cada pequeño particular es mágico, divertido, original. El alma respira y aparece el verdadero placer de la vida, lejos de nuestros días caóticos y grises llenos de estrés en el trabajo. Abrir los ojos en lugares donde incluso un póster en la pared nos recuerda el placer que la vida nos puede dar, incluso con pequeños detalles, así comprendemos que esbozar una sonrisa es fácil gracias a una manta que nos regala calor en una noche fría. Los accesorios para niños son emocionantes, un par de calcetines pueden transformar sus pies fríos en dos erizos que andan y crear cuentos que estimulan la fantasía de los pequeños. Los delantales para cocina propuestos por la empresa con una imagen llena de pequeños abetos pueden cautivar a los niños y revelarnos el placer de cocinar juntos galletas durante un domingo de lluvia. Todo es belleza y arte, arte de vivir principalmente. Un mensaje filosófico, un consejo cariñoso, un fuerte abrazo. Todo ello es Fine Little Day. Una empresa con grandes contenidos, formas sencillas, divertidas, no definidas y auténticas, para que volvamos a lugares donde podemos sentirnos tranquilos sabiendo que la perfección no nos pertenece. Pero no nos falta nuestro aspecto único, en cada objeto, en las sábanas, en almohadas divertidas, en los plaids, en los estantes de hormigón y cristal combinables en varias maneras. La vida es sueño y el sueño debe seguir presente y vivo, interior pero claro y concreto, objetivo fijo de cada día, para no alejarse demasiado de la naturaleza interior y mantenernos fieles a ese valor único que nos define y que nos diferencia de los demás. Una necesidad, instintiva como los dibujos, que será una inspiración para quienes quieren conocer esta pequeña empresa que crea maravillosas obras llenas de amor, cariño y fantasía. Inspiraciones que pueden ser un ejemplo que se pueden guardar en el corazón, en los cajones o en las paredes. Fine Little Day es una compañera cariñosa que nunca nos dejará, que marcará un nuevo inicio.

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